Un hermoso Lunes después de la llamada larga y aburrida con los Helveticos me dispuse a salir de casa e ir a la oficina. En los 100 metros desde la puerta de mi casa hasta el estacionamiento me crucé con un grupo de Mormones... curioso, siempre pensé que viajaban en mandas pares... pero bueno...
El 'lead' Mormon, con pantalon de vestir negro, camisa blanca y lapicero con la inscripción clásica; me detuvo en la vereda sobre la calle Paraguay, notese que no hay iglesias mormonas cerca de este lugar, a lo cual antes de darle tiempo a hablar hice un gesto con la mano y le indiqué claramente que no tenía tiempo en ese momento.
Procedo a reproducir la conversación.............
Mormon: No, Hermano, solo quiero hacerle una pregunta.
Asumiendo que se trataba de una pregunta logística (cómo llego a tal calle?) accedí a responder su pregunta.
Mormon: Si Dios vinera y le dijera que Él dirige una Iglesia, se bautizaría en esa iglesia?
Yo: (Intentando contener la risa) hmmmm (cara de pensativo) Probablemente no.
Mormón: Por qué?
Yo: (con cara de placer) porque soy Judío (levanté un dedito), científico (levanté otro dedito) y gay (tercer dedito arriba).
Mormon: (cara de incomodidad) Gracias por su tiempo, Hermano.
Yo: (un paso más cerca del infierno).
Citando Latter Days: Your church doesn't like alcohol or homosexuals, I'm definitely not joining-I can't imagine Heaven without Both! (Jaqueline Bisset)
miércoles, 28 de octubre de 2009
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